martes, 4 de agosto de 2009







Uno de los conceptos manejados en mi obra es el concepto de la otredad. Octavio Paz, dice; “La otredad es para el hombre moderno un mal que se soporta con dolor; la conciencia moderna no acepta que su individualidad sea una realidad plural y que detrás del hombre que piensa se esconda otro que mantiene una vida “ilógica”, que sostiene a menudo lo que la razón reprueba. De esta manera, es posible concluir que la unidad no existe. Si el hombre es tiempo (como habría afirmado HEIDEGGER), su vida es un movimiento constante, un transcurrir ininterrumpido; es él y es otro. La otredad sería, por lo tanto, la forma en la que la unidad se despliega, siempre la misma, siempre diferente. Los otros que nos habitan no son estables; el hombre cambia y con él sus interlocutores. El hombre no es nunca completamente, es siempre una inminencia de ser. Por ello, esta obligado a salir de sí mismo para recuperar su imagen: el hombre, siempre inacabado solo se completa cuando sale de sí y se inventa.




Por lo tanto, solo seremos nosotros mismos si somos capaces de ser otro, pues nuestra vida es nuestra y de los otros.” Tiene un poema que dice así;
--- ¿La vida, cuando fue de veras nuestra?
¿Cuando somos de veras lo que somos?
bien mirados no somos, nunca somos
a solas sino vértigo y vacio,
muecas en el espejo, horror y vomito,
nunca la vida es nuestra, es de los otros,
la vida no es de nadie, todos somos la vida…
…Soy otro cuando soy, los actos míos
son más míos si son también de todos,
para que pueda ser he de ser otro,
salir de mi, buscarme entre los otros,
los otros que no son si yo no existo,
los otros que me dan plena existencia,
no soy, no hay yo, siempre somos nosotros,
La vida es otra…
(PIEDRA DE SOL)

Entre el 2007 y 2008 se celebro el II Salón Regional de Escultura aquí en Porlamar, en el Museo Francisco Narváez, expuse la obra titulada: “La ultima perla de Margarita.” Dicha obra esta inspirada en la obra del Artista Neoespartano José Marcano titulada “Madre Perla”, ubicada en la plaza de los Robles, es otra realidad fantástica de ese icono de la ciudad. La obra es una concha de Mar Inflable y yo estoy acostado sobre la concha, vestido satirizando la publicidad del perfume de JEAN POOL GOTIE y de la cintura para abajo con una cola de pez o sea de TRITON, con una pelota a rayas azul celeste con una calcomanía de mi rostro pintado de blanco, era la perla. Un video que comienza, yo llenado la concha inflable y se escucha un Galerón de Villarroel de fondo musical titulado punto del navegante, y luego recito un poema de Octavio Paz que habla sobre la otredad. El video es el proceso de instalación de la obra, para la realización de la toma fotográfica y la locación fue en la playa La Caranta, los pescadores fueron los espectadores. Esta misma obra fue seleccionada para la IX Bienal de Escultura, que se realizo en el museo Francisco Narváez.

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